Parque Santa Olga nace debido a los incendios ocurridos en la zona central de Chile el año 2017. El parque pretende restaurar la quebrada de Santa Olga, proteger el Rio Purapel y crear un espacio útil para la comunidad. La selección de vegetación fue puramente nativa, entre ellas huilmos, calle calle, malvitas de cerro, maitenes quillayes, canelos, entre otros.